Poner en práctica el #EmpoderamientoPersonal para la construcción de nuestro #proyectodevida

¿Te ha pasado alguna vez que te sentiste incapaz de tomar una decisión o de afrontar alguna situación? Muchos de los factores que nos permiten tomar decisiones y afrontar las situaciones que vivimos en el día a día se enmarcan en aspectos personales que por simple desconocimiento no valoramos. Estos aspectos personales los podemos resumir en dos palabras que seguramente ya has escuchado anteriormente. Sí, el empoderamiento personal.

¿Y qué es el empoderamiento personal? Significa que seas capaz de tomar decisiones ante las distintas situaciones que se te presentan en los ámbitos de tu vida. El empoderamiento personal como muchas de las otras capacidades que todos los seres humanos podemos desarrollar aparece como resultado del fortalecimiento de factores básicos que le anteceden.

Factor #1: Autoeficacia: La autoeficacia es la confianza que tenemos en nuestras propias capacidades y muchas veces es el primer paso que necesitamos tomar y tener para poder alcanzar los logros y resultados que queremos. Por más que deseemos lograr una meta o un sueño va a ser muy difícil hacerlo si no nos creemos capaces para ello.

No sabernos capaces de poder ejecutar los planes de acción necesarios para alcanzar una meta es lo que muchas veces no nos deja iniciar ese plan o bien culminarlo. La autoeficacia se encuentra muy relacionada con conceptos que probablemente has escuchado anteriormente como el uso de la autoestima y el autoconcepto y el efecto que ésta puede tener sobre los mismos es uno de los tantos marcadores que pueden determinar qué tan empoderados nos podemos llegar a sentir. Así pues lo que necesitamos para poder desarrollar un empoderamiento personal es tener confianza sobre nuestras propias capacidades para poder obtener los resultados que pretendemos.

Y te preguntarás cómo podemos tener una creencia de alta autoeficacia. Tenemos que alinear nuestros pensamientos con nuestras acciones para que sólo así podamos ejecutar los planes de acción necesarios para lograr los resultados que queremos y que en consecuencia eso nos permita sentirnos empoderados. Pero para ello es necesario que pasemos a un segundo punto muy importante que tiene que ver con el desarrollo de habilidades.

Factor #2: Desarrollo de habilidades: Reconocer tus límites es la única manera de trascenderlos. Para poder llegar a ser una persona empoderada es necesario que reconozcas tus debilidades y que hagas lo necesario para convertirlas en fortaleza. Para esto puedes ejecutar acciones como por ejemplo formarte y adquirir capacidades nuevas o bien fortalecer esas capacidades con las que ya cuentas.

Asimismo, tener en cuenta que hay habilidades y competencias básicas independientemente de quiénes seamos y al que nos dedicamos debemos desarrollar como por ejemplo la creatividad, el pensamiento crítico, la comunicación y el trabajo en equipo. Y para que este segundo factor de habilidades se pueda dar y las podamos desarrollar tenemos que tener en cuenta un factor muy importante y es el tercer punto, las herramientas.

Factor#3: Herramientas: Si te encuentras con que requieren ciertas habilidades o capacidades que no tienes desarrolladas es necesario que puedas hacer una búsqueda muy puntual de cuáles son esos recursos o herramientas que existen y de los cuales te puedes apoyar para poder desarrollar estas habilidades.

Por ejemplo puedes poner en práctica acciones como buscar recursos técnicos que te permitan desarrollar estas habilidades, cursos, talleres, seminarios, libros, películas, actividades prácticas. Todo esto con el fin de aprender en la teoría y en la práctica esa habilidad y poder desarrollarla. También es importante que puedas identificar cuáles son tus redes de apoyo, cuáles son esos medios sociales en los que te desenvuelves más y de esos, qué personas te podrían ayudar a desarrollar esas habilidades que requieren.

Factor#4: Motivación Intrínseca: El cuarto factor importante es la motivación intrínseca. Para poder ser personas empoderadas en todos los ámbitos de nuestra vida y en las situaciones que cada uno de estos ámbitos conllevan, es necesario que nos sintamos genuinamente interesados por aquello que somos y hacemos. Cuando aquello que hago me representa el empoderamiento personal se convierte entonces en el resultado de defender todo lo que es importante para mí y mi vida.

Por eso es importante que evalúes constantemente cuál es la motivación que hay detrás de todo lo que haces en cada uno de los momentos de tu vida. Si eso que hago me representa y es importante para mí, el empoderamiento personal fluirá. La motivación será esa gasolina de esfuerzo para iniciar, desarrollar y culminar las tareas en los diferentes ámbitos de nuestra vida.

Factor#5: Cuida tus pensamientos: Y como quinto y último factor, pero no menos importante, está el cuidado de tus pensamientos. Ante un obstáculo siempre hay dos opciones, abandonar la tarea o generar un esfuerzo mayor. Producto de una creencia de autoeficacia en que eres capaz de lograrlo.

Tendemos a creer que ser personas empoderadas significa que no podemos experimentar situaciones como el miedo o la inseguridad. Sin embargo, las personas más empoderadas son aquellas que ante situaciones de miedo e inseguridad han sido capaces de, a partir de sus habilidades y competencias, tomar decisiones adaptativas y afrontar las situaciones que están presentando. Y solamente con esos resultados positivos, a partir de una situación en la que experimentaron miedo o inseguridad, fortalecieron ese empoderamiento personal.

Dentro de ese proceso de empoderamiento personal es necesario que nos veamos expuestos a este tipo de situaciones, porque solamente ante las situaciones de miedo e inseguridad es donde vamos a poder poner en práctica nuestro empoderamiento personal, sirviéndonos de todas esas habilidades, herramientas, recursos de los que ya hemos hablado y que nos van a permitir, en consecuencia, aumentar la confianza en nosotros mismos y, en última, ser personas más empoderadas. Ser personas empoderadas no ocurre de la noche a la mañana. Para ello requerimos mucho esfuerzo y dedicación.

Y nunca tendremos la voluntad de empoderarnos si no tomamos decisiones y aceptamos las responsabilidades que esas decisiones conllevan. Una persona empoderada, por sobre todas las cosas, es una persona coherente entre sus palabras, acciones y pensamientos. Así pues, cuando nuestras creencias sobre nosotros mismos nos limitan y no nos permiten desarrollarnos, va a ser muy difícil que podamos tomar las decisiones que requiere el empoderamiento personal.