Preguntas sociales que generan crisis existenciales en nuestra vida profesional.

¿Alguna vez te has dado cuenta de que hay preguntas que, aunque se hacen con la mejor intención, pueden generar cierta incertidumbre en nuestra vida profesional? A todos nos ha pasado. Quiero compartir contigo algunas de esas preguntas comunes y cómo podríamos abordarlas de una forma más cálida y comprensiva. 1. ¿Cuándo te vas a cambiar de trabajo?

En lugar de preguntar esto, podríamos decir: “Me alegra saber que estás explorando nuevas oportunidades. ¿Te gustaría compartir qué estás buscando?” Esto muestra interés sin presión.

2. ¿Ya sabes qué rumbo tomar en tu carrera?

En vez de hacer esta pregunta, podríamos decir: “Tómate tu tiempo para decidir. Es una elección importante y debe resonar contigo.” De esta forma, validamos su proceso de reflexión.

3. ¿Por qué aún no has encontrado trabajo?

En lugar de lanzar esta pregunta, podríamos ofrecer apoyo: “Si necesitas ayuda en tu búsqueda, cuéntame. Estoy aquí para lo que necesites.” A veces, solo necesitamos saber que hay alguien que se preocupa.

4. ¿Por qué no has recibido un ascenso?

Podríamos reformularlo así: “Confío en que el momento de tu ascenso llegará. ¿Te gustaría hablar sobre tus metas a corto plazo?” Esto da espacio para que la persona comparta sus aspiraciones.

5. ¿Por qué no estás emprendiendo ya?

En lugar de cuestionar, podríamos decir: “Es genial que estés tomando tu tiempo para planificar. Cuando decidas emprender, será el momento adecuado.” Es importante reconocer que cada uno tiene su propio ritmo.

Lo Que Podemos Cambiar:

A veces, sin darnos cuenta, hacemos preguntas o comentarios que pueden hacer que los demás se sientan incómodos. Es hora de dejar de:

• Preguntar de manera intrusiva.
• Opinar sobre las decisiones laborales de otros.
• Sugerir caminos que pueden no resonar con ellos.

Y Empezar a:

Referir recursos o apoyos sin imponer nuestras ideas.

Validar las experiencias laborales de quienes nos rodean.

Escuchar de manera activa y empática.